La imagen de Santa María Magdalena se venera en culto privado, en la casa de los herederos de Dolores López Monte, mecenas que se encargó de adquirir y encargar su hechura.
Su culto privado se debe a la quema y destrucción en julio de 1936 de la imagen anterior, también propiedad de la familia de Dolores, la cual se exponía al culto en la Iglesia de la Asunción de Nuesra Señora, ocupando la segunda capilla del ala oeste, contigua a la capilla donde se venera a la Santísima Virgen de los Dolores. Por tan nefasto infortunio, Dolores López Monte, prometió que se encargaría de velar por la seguridad de Santa María Magdalena en su propia casa, reservando para ella, la mejor habitación.
Con el paso de los años, la hermandad siempre ha sido fiel a ese mandato y a pesar de que el hijo de Dolores y primer Presidente de la Hermandad formada en 1971, Antonio Gómez López, puso la imagen a disposición de la hermandad, su salvaguarda y culto ha corrido a cuenta de los familiares de Dolores.
Ahora, y aprovechando las obras de restauración de la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, la hermandad ha solicitado la cesión de una capilla para albergar las imagenes titulares de la misma, con el fin de disponer de un lugar digno para el culto en el momento en que tenga que hacer frente a la importante tarea heredada de Dolores.
La comisión encargada de recaudar fondos para llevar a cabo estas obras de restauración ha cuantificado el coste de las mismas en 5.000€ para cada una de las capillas que posee la Iglesia de la Asunción. éste dinero será sufragado por la hermandad y para su consecución se han puesto en marcha diversas actividades recaudatorias como rifas, abonos y ventas varias. Con todo ello, cualquier persona o hermano puede aportar un granito de arena, realizando una donación en la cuenta de la hermandad de la entidad Globalcaja con el concepto "Capilla".
Pronto dispondremos de una nueva casa para Santa María Magdalena.